MASSACRE Y...1) la vanguardia. Fueron hardcore, punk, grunge, skaters, sónicos, alternativos... Lo único que falta ahora es que les digan indies. Los Massacre no son una simple nostalgia de los '90: en sus discos citan a los Kinks, Grateful Dead, Sumo, Clash, R.E.M, Fugazi, Hüsker Dü... ¡Y hasta Sergio Denis! ¿Se acuerdan de la versión de "Te Quiero Tanto" para la peli Cara de Queso? Chequear también el disco Singles+Covers+Rarities (1999) o el EP Fue una suerte (2001), que cierra con "El Probador" (Virus).
2) el sonido del Luna Park. Horroroso, como de costumbre. Acoples, saturaciones y un tema casi instrumental ("Vienen zombies") porque no se escuchaba la voz de Walas y se lo veía haciendo mímica. Con Obras Sanitarias cerrado este año (algunos le dicen Estadio Pepsi Music), no quedaban muchas opciones, ¡Rompan todo!
3) la panza más querida del rock. Humor, chispa, ternura y los latiguillos de siempre. Walas es una mezcla entre el Billy Bond de la época de La Pesada, Tony Hawk y un pote de dulce de leche Gandara. También es la pareja perfecta para Beth Ditto, cantante de Gossip, que al menos afina más que La Tori.
4) la mala suerte. Desde la época de Massacre Palestina (mandarina, mandarina, mandarina), cuando el atentado a la Embajada de Israel (1992) los obligó a reducirse sólo a Massacre, hasta el accidente de Fico Piscorz el año pasado, cuando estaban por llegar a Obras. La banda siempre tuvo su cuota de gualicho y este Luna Park, postergado en agosto por la Gripe A (mientras rotaba "La Epidemia" como soundtrack de esos días tan ratones y paranoicos) y la poca venta de entradas, no fue la excepción. Pugliese, Pugliese.
5) la puesta en escena. Correcta, lograda (ídem el vestuario de los músicos), con buenos clips en las tres pantallas, y repleta de los payasos macabros característicos, diseñada para una banda que sabe lucirse (especialmente Pablo "El Tordo" Mondello, que la gasta con su guitarra PRS, al punto que uno del público le gritó: "¡Aprendé, Mollo!"). Casi 3 horas de show (excesivo, por momentos) con una lista de 31 temas.
6) el repertorio. Abrieron con "Diferentes maneras" (himno de alcantarillas, declaración de principios, a puro mosh), repasaron todo El Mamut (menos "Maggie May"), metieron un bloque patológico ("Sofía la super vedette", "Adiós caballo español", "Seguro es por mi culpa") y no se olvidaron de los clásicos de siempre ("3 paredes, "Nuevo día", "From your lips", "Te leo al revés", "Mi mami no lo hará"). No hubo covers, salvo "Plan B: Anhelo de satisfacción", de Catupecu Machu... ¡Cuac!
